Pipa, la última película de la trilogía de Alejandro Montiel, se convirtió en el primer film de habla no inglesa de Netflix a nivel global.
Ivonne Quispe tiene 33 años y es profesora de biología en la Escuela de Minas “Dr. Horacio Carrillo» de San Salvador y La Quiaca. Fue al casting “de casualidad” y obtuvo el papel de Luna, una líder de los pueblos originarios, que buscaba proteger a su comunidad.
En diálogo con Sobre Tiza y en su experiencia como docente, destacó la importancia que, a partir de ese tipo de producciones audiovisuales, se pueda mostrar los paisajes de Jujuy y Salta, a través de sus lugares turísticos, como Cafayate, Tilcara y Purmamarca.
En ese sentido, “se puede ver cómo unen los paisajes para contar una historia y también apostar a la cultura local, ya que hay escenas en donde se ve el Carnaval, que es una celebración propia del Norte. Fue importante que se pueda conocer más de nosotros”, destacó Ivonne a Sobre Tiza.
El respeto de la cultura más allá de la ficción
Ivonne contó a Sobre Tiza que ella, en las aulas, también enseña el respeto por la cultura: “Nosotros vemos el cuidado del ambiente por la Ley de Educación Ambiental y después abordamos la biodiversidad y el respeto por las especies que están en peligro de extinción”.
En ese sentido, destacó la importancia que reviste enseñar sobre el respeto a la diversidad, y destacó que la película es un ejemplo de cómo se puede conocer a través de otros medios, en este caso, se trata de un film que “tiene mucho que ver con la defensa de los derechos y lo que nos corresponde, con la cultura misma que tiene el norte argentino”.
Luna y la defensa de sus tierras
Sobre el papel que le tocó interpretar, siendo una líder de pueblo originario, la docente resaltó que “se trató de un personaje con el cual me siento identificada, porque es una mujer que lucha por la defensa de los pueblos originarios y sus tierras. Sentía que podía hacerlo”. Con la historia, “me llevé mucho aprendizaje, pero todavía me queda mucho por aprender”, aclaró a este medio.
Respecto a las críticas que recibió la producción sobre la tonada que los actores trataron de imitar, muchos habitantes aclararon: «Nosotros no hablamos así». Ivonne remarcó que “la idea no es imitar al jujeño, sino utilizar palabras que nosotros utilizamos y las fuimos perdiendo con el tiempo (Changuito, por ejemplo). Como espectador, siempre hay críticas buenas y malas, pero, a pesar de todo, que se haga conocer el norte, ya es un avance”, resaltó.