El Ministerio de Educación de la Nación, Conectar Igualdad y la Organización de los Estados Iberoamericanos para la Ciencias la Educación y la Cultura (OEI) realizaron el «Seminario sobre Evaluación de Políticas Públicas de inclusión digital en ámbitos educativos». El encuentro se llevó a cabo el martes y miércoles de la semana pasada y contó con la participación de especialistas de la región Iberoamericana, quienes debatieron acerca de la importancia de la evaluación al momento de implementar este tipo de políticas.
Luego de la apertura de Francesc Pedró, especialista de la UNESCO, se presentaron experiencias de evaluación de Colombia, Venezuela, Chile, Uruguay y Argentina. Las miradas sobre la evaluación y el monitoreo de las políticas coincidían en que no es posible utilizar un único método de recolección de información para saber cómo estos programas promueven cambios en los procesos de enseñanza y de aprendizaje, o cómo se articulan con otras políticas que inciden más o menos directamente en el ámbito educativo.
La implementación de cuestionarios para el relevamiento de cuestiones de orden cuantitativo, hasta la puesta en marcha de jornadas de observación y entrevistas para conocer a fondo las experiencias de docentes, estudiantes, directivos y familiares, derivan en una gran cantidad de datos que deben encontrar coherencia no solo en el análisis sincrónico, sino también a lo largo de los procesos de seguimiento. Esto se debe a que los modos de procesar esta información no siempre reflejan un momento determinado sino que se cruzan y no es posible ubicarlos en un mismo espacio temporal.
Además de los especialistas implicados en los diferentes programas de países vecinos, académicos compartieron sus ideas acerca de la evaluación, sobre qué mirar y qué tener en cuenta a la hora de pensar en esta tarea. En este sentido, Inés Dussel fue también una de las pocas que habló de la fuerte vinculación de las políticas públicas de inclusión digital y el sector privado de la industria informática, siendo este último un actor fundamental como proveedor, pero también quien articula sus ventas al estado con sus propósitos comerciales y de rentabilidad.
También compartieron sus experiencias de evaluación del programa nacional Conectar Igualdad, los representantes provinciales, quienes dieron a conocer cómo estas grandes expectativas de evaluación se complican al momento de llegar al campo. Desde la falta de recursos técnicos hasta la imposibilidad de profundizar en las representaciones de los diferentes actores, no son pocas las complicaciones que hay en las diferentes provincias.
Por último, tres especialistas en Educación y Nuevas Tecnologías brindaron sus ideas respecto de las tendencias de la inclusión digital educativa y social. Dolors Reig habló de los cambios que nos proponen las redes sociales tanto desde nuestra idea de privacidad e intimidad como de nuestros modos de relacionarnos con otros. Por su parte, Mariana Maggio habló de cómo podemos potenciar y enriquecer la enseñanza valiéndonos de la tecnología, pero sin perder de vista la importancia de las buenas prácticas. Por último, Hugo Martínez afirmó que las tecnologías no solucionan todos los problemas de la educación, pero que no por eso debemos perder la esperanza de que nos ayuden a mejorar nuestras prácticas. También señaló la importancia de que cada docente encuentre en las tecnologías un aliado que se adecue a sus modos de enseñar, y no solo utilizarlas pretendiendo que ese uso implica una innovación.
