El director ejecutivo del Programa Conectar Igualdad, Pablo Fontdevila, confirmó que a partir de marzo de 2013, las netbooks que se entregan a los alumnos contarán con un sistema operativo basado en Software Libre y desarrollado “ad hoc” en Argentina. Aún se está evaluando cuál será el nombre que se utilizará para su distribución, pero entre las opciones posibles está “Wayra”, una palabra quechua cuyo significado es “viento”. Por el momento, se refieren a éste como Linux-Conectar.
La revista de gobierno electrónico PuntoGOV realizó una serie de entrevistas con integrantes del Ministerio de Educación y el PCI, con la intención de conocer más sobre esta nueva etapa que inicia en esta política de inclusión digital. Según Fontdevila, en el proyecto participa un equipo de profesionales del Centro Nacional de Investigación y Desarrollo en Tecnologías Libres (Cenital), que dirige Javier Castrillo.
Castrillo afirmó al medio especializado que la iniciativa consiste en la creación de una “metadistribución” de un sistema operativo libre “con identidad nacional, que favorezca la autonomía tecnológica y establezca estándares de seguridad y desarrollo propios”.
¿Por qué ahora?
Fontdevila precisó que si bien siempre existió una apuesta por la independencia tecnológica, trabajar con software libre, permite afianzar esa independencia, asegurando además que “el Estado tiene una creciente autonomía tecnológica”. Asimismo, agregó que este plan “se concibió como un proyecto que iba a avanzar hacia el software libre”, aunque en sus inicios no se hizo un corte con la cultura del sistema operativo propietario de Microsoft.
Emiliano La Rocca, asesor de la Subsecretaría de Coordinación Administrativa del ministerio de Educación de la Nación y coordinador general del Programa Aulas Modelo, Fontdevila y Castrillo señalaron a PuntoGOV que esperan tener una primera versión beta en los próximos meses, antes de fin de año, y que en el próximo inicio de clases, en marzo de 2013, lleguen los equipos con el nuevo SO. No obstante, Fontdevila no descartó que las netbooks continúen con la opción de doble booteo, y señaló que “Microsoft está dispuesto a pagar para no quedar afuera”.
Según explicó La Rocca se piensa en una doble estrategia: por un lado ofrecer capacitación para facilitar el uso del SO, pero piensan en desarrollarlo, “en términos cognitivos”, a las representaciones sociales más comunes sobre los sistemas operativos. “Muchas veces el lenguaje representa una barrera a la hora de usar otro sistema operativo distinto a Windows, es allí donde hay esfuerzos concentrados en hacer del SO del Conectar un entorno amigable e intuitivo”, afirmó.
Cuando se le consultó sobre lo que sucederá con las netbooks ya distribuidas, y si éstas deberían migrar obligatoriamente al nuevo sistema, La Rocca señaló que cada netbook tiene un software de origen, y aquellos que ya hayan recibido su netbook podrán “optar por quedarse con el sistema instalado o descargar la nueva versión e instalarla de manera sencilla y guiada con una aplicación especialmente desarrollada a esos fines, de manera tal que permita remplazar todos los SO de la máquina por el Linux-Conectar, o remplazar solo la versión de Linux instalada”.
