Con la participación de líderes de la educación en Iberoamérica, la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) realizó el taller ‘Retos actuales de la gobernanza educativa: innovar para proteger y progresar’ (Current challenges of educational governance: innovate to protect and progress) durante la séptima edición de la Conferencia Internacional de la Educación de Adultos (CONFINTEA VII), que organizó la UNESCO en Marruecos.
En ese marco, ante la previsión de que el 15% de los empleos actuales desaparecerán, la OEI hace un llamamiento a fortalecer nuevas habilidades desde la educación para adultos.
Desde la ciudad marroquí de Marrakech, el taller puso sobre la mesa cuáles deberán ser los nuevos enfoques de la educación a lo largo de la vida a partir de la gobernanza educativa de los sistemas iberoamericanos, teniendo en cuenta experiencias exitosas en Ecuador y Uruguay.
Andrés Delich, secretario general adjunto de la OEI, moderó el taller, en el que también participaron María Brown, ministra de Educación del Ecuador; Gonzalo Baroni, director nacional de Educación, del Ministerio de Educación y Cultura del Uruguay e Ignacio Vidaguren, COO de la empresa Aleph, con sede en la Florida.
La ministra María Brown resaltó el papel que tiene el estado como garante del derecho a la educación a lo largo de la vida, así como promotor de un sistema de gobernanza colaborativo, cooperativo y corresponsable. Asimismo, remarcó como aciertos en su país la eliminación del límite de la edad para matricularse en las ofertas de formación, la consideración de las necesidades formativas de personas con educación inconclusa, con discapacidad, lenguas maternas indígenas y privadas de libertad, así como la adaptación de métodos de enseñanza y aprendizaje adaptados a la realidad del país.
Por su parte, Gonzalo Baroni destacó el trabajo de la Red de Educación Para Jóvenes y Adultos (EPJA) conformada en el Uruguay, y de la cual forman parte el gobierno, la cámara de empresas, la cámara de cooperativas y la sección sindical. Juntos desarrollan políticas públicas de recapacitación, que impulsan y alimentan planes y medidas concretas para la educación de personas jóvenes y adultas, con y sin trabajo, certificando competencias, brindado oportunidades laborales y de desarrollo personal. “No hay gobernanza si no hay información para la población”, aseguró.
Finalmente, Ignacio Vidaguren sostuvo que “está previsto que el 15% de los empleos actuales desaparezcan”, por lo que plantea “que estas personas aprendan nuevas habilidades para incorporarse en el mundo laboral». De acuerdo con el experto, “el impacto de reentrenar a gente con trabajos que se van a quedar obsoletos puede suponer un crecimiento del 8% el PIB».
Adultos Mayores: La importancia de promover la inclusión digital
Datos
Según un informe de la UNESCO, si bien hay avances, especialmente en la participación de las mujeres, aún persisten aquellos que más necesitan la educación de adultos, quienes se ven privados de acceso a oportunidades de aprendizaje, a saber, grupos desfavorecidos y vulnerables como los estudiantes indígenas, las poblaciones rurales, los inmigrantes, los ciudadanos mayores, las personas con discapacidad o los presos, entre otros.
Alrededor del 60 % de los países informaron que no hubo mejoras en la participación de personas con discapacidad, migrantes o reclusos. El 24% de los países informaron que la participación de las poblaciones rurales había disminuido, mientras que la participación de los adultos mayores también disminuyó en el 24% de los 159 países encuestados.
En ese sentido, se exige un cambio importante en el enfoque de los Estados miembros para el aprendizaje y la educación de adultos respaldado por una inversión adecuada para garantizar que todos tengan la oportunidad de beneficiarse del aprendizaje y la educación de adultos.
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